Penny, caída del cielo: retrato de una familia italoamericana
Jennifer L. Holm
Bambú, colección Vivencias
Un nuevo verano sorprende a Penny, nuestra protagonista, a la que todos llaman así por la canción Pennies from heaven de Bing Crosby, una ocurrencia de su padre, que hace que Penny se olvide de su verdadero nombre, Barbara Ann Falucci. Penny tiene once años y una vida un poco complicada porque tiene dos familias. Su familia americana con quien vive; el abuelo Pop-Pop, la abuela Me-me, su madre y su perrita Escarlata O’Hara y su familia italiana. La extensa familia Falucci con los que comparte unas interminables comidas a la italiana. El verano es realmente aburrido, a Penny no la dejan ir a la piscina por si se contagia de poliomelitis y además se pasa las tardes ayudando en el colmado de su tío llevando los pedidos a domicilio acompañada por su primo Frankie, su primo y su mejor amigo, cuyas ideas siempre los meten en algún lío, si no fuera por tío Dominic, por el helado de nueces de pecán y por el béisbol…
Leer esta novela es como ver una película americana de los 50’, te imaginas las avenidas de Nueva Jersey, las casas unifamiliares adosadas con su jardincito a la entrada y un gran Plymouth aparcado en la puerta. Leer Penny, caída del cielo es como ver un álbum familiar de aquellas generaciones de italoamericanos que llegaron a América trayendo en su maleta los recuerdos de la bella Italia.
Elena Hernández
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